La pandemia del coronavirus pegó fuerte en la industria, más que nada en la automotriz. Mientras algunas plantas situadas en provincias con mejores perspectivas que el AMBA ya comenzaron a reabrirse, la situación en la localidad bonaerense de El Palomar exige cuidados especiales, los cuales ya se aplican para comenzar una reanudación gradual y segura.
En esa localidad Peugeot y Citroën fabrican vehículos, y la principal estrella es el nuevo Peugeot 208 que estrena la plataforma CMP y está próximo a lanzarse. Para que todo funcione bien, el Grupo sigue una serie de pautas con el fin de cuidar la salud:
Se pide utilizar dentro de lo posible el transporte individual. Para el uso compartido de vehículos y el transporte, se aseguró la provisión de barbijos y la implementación de un procedimiento para sentarse (organización escalonada desde la parte trasera del transporte). Por otro lado se implanta una comprobación de la temperatura en el ingreso a la unidad, además de la hoja de seguimiento para autocontrol requerida (con 14 días sin fiebre y otros síntomas).
Además, dentro de la planta se garantiza el suministro individual de barbijos y disponibilidad de alcohol en gel, la utilización obligatoria de gafas protectoras y barbijos, el respeto al distanciamiento social en todos los lugares de la unidad, incluidas las áreas de descanso y las áreas para fumadores con demarcación en el suelo, las puertas abiertas (excepto las puertas contra incendios) para evitar el contacto con las manijas y la limpieza frecuente de herramientas y superficies de trabajo.
Con este protocolo en marcha, se espera que la capacidad operativa de la fábrica vuelva a sus niveles normales en el corto plazo.