Cuando aparecieron los primeros autos eléctricos, hace aproximadamente una década, las marcas se empeñaban en hacerlos diferentes y más aerodinámicos, lo que daba como resultado vehículos poco menos que espantosos. Afortunadamente, hoy se refinaron y ya son coches "normales" y hasta atractivos a la vista. Algo similar ocurrió con las motos, que además sumaban otro problema: no tenían espacio para las baterías, que encima eran muy pesadas.
Las nuevas tecnologías permitieron que las baterías disminuyeran su tamaño y adquirieran diseños convencionales, a lo que hay que sumarle que la actual pandemia hizo ver a las motos como una opción real de transporte, y qué mejor si es eléctrica.
La Damon Hypersport es una apuesta casi ideal para los tiempos actuales. Fue presentada en el último Consumer Electronics Show (CES), donde la empresa de origen canadiense recibió un reconocimiento por su innovación.
La superbike del fabricante afincado en Vancouver tiene un peso de 226 kilos, algo casi normal para el segmento de motos deportivas aunque ya no para una súperdeportiva. En cuanto a mecánica, ofrece números más que interesantes, al erogar 215 CV de potencia y una autonomía de 322 kilómetros para la combinación ciudad/ruta, aunque si únicamente transita la urbe puede llegar hasta los 500 km. Su sistema de recarga es apto para cargadores Nivel 2 (domiciliario y wallbox), por lo que su tiempo para obtener energía es menor a las tres horas.
En cuanto a velocidad, es similar a una deportiva de 1.000cc, con una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos y una velocidad máxima de 320 km/h.
¿Te quedaste sin electricidad en casa? No te preocupes
Un dato sumamente curioso de esta Damon Hypersport es que tendrá un modo denominado V2G (Vehicle to Grid), que hará de la batería de 21.5 kWh un banco de poder para alimentar electrodomésticos hogareños. Sí, así como lo escuchaste.
En cuanto a electrónica estará bien equipada gracias al acuerdo de cooperación con la también canadiense Blackberry, que proveerá una serie de cámaras y radares para brindar distintas ayudas a la conducción, como por ejemplo radares de puntos muertos en 360° que darán alertas acústicas, eliminando así los espejos laterales. Otro dato interesante es que la altura del manillar y la posición del apoyapies podrán regularse fácilmente.
El precio en sí es un punto que lamentablemente siempre nos aleja de las nuevas tecnologías: costará USD 25.000, al menos en su versión Premier, que incluye elementos de lujo como los frenos Brembo, suspensión Öhlins y accesorios de fibra de carbono. Si bien es cara, no está tan alejada de modelos tope de gama de las marcas convencionales.