En febrero del año pasado, Yamaha presentó un curioso motor eléctrico configurable, para uso tanto en autos como en motos. Este impulsor ya comenzó a ser probado en un Alfa Romeo 4C y la marca lo ha concebido de tal manera que pueda instalarse en modelos con motores de combustión térmica. Se trata de un motor compacto, liviano y que puede ofrecer potencias que van desde los 47 hasta los 268 CV.
Tras haber presentado su primera moto 100% eléctrica, Yamaha anuncia que tiene en sus manos un nuevo motor de 800 volts, refrigerado por aceite y capaz de alcanzar casi 500 CV en sus aplicaciones más potentes. La idea es que este impulsor pueda trabajar de a dos en un eje o hasta con cuatro aplicaciones, por lo que podría alcanzar una potencia de hasta 2.000 CV.
Toda la experiencia que la marca japonesa ganó en el campo de las motos y de los autos (la realidad es que también trabaja mucho en desarrollos automotrices) les permitió lograr un paquete muy compacto, que reúne en un solo módulo los componentes eléctricos y mecánicos de este motor, que a su vez se orientaría hacia fabricantes emergentes y hacia quienes deseen desarrollar vehículos deportivos de alta gama.
Lo mejor es que Yamaha también ofrecerá su asesoramiento en el desarrollo de prototipos para quienes deseen emplear sus motores, pudiendo así adecuar las baterías o los sistemas de refrigeración de acuerdo a lo que el cliente desee.
El próximo paso de Yamaha será en la Feria de Ingeniería Automotriz de Yokohama, en el próximo mes de mayo, donde presentará su flamante motor al mundo.