Renault está decidido a convertir a Alpine en un referente del mundo de las carreras, por lo que además de su participación en la Fórmula 1, la marca francesa mantiene una presencia permanente en el Campeonato Mundial de resistencia (WEC) desde 2013
En este 2021, en el debut de la era de los Hypercars, Alpine continuó en el certamen, aunque aprovechando una ventana en el reglamento para competir con un viejo LMP2 adaptado. Con él acabaron terceros en las últimas 24 Horas de Le Mans, nada menos. Sin embargo, ya saben que al modelo mucho tiempo de vida no le queda.
Como ya es época de tomar decisiones para el futuro, la firma gala acaba de anunciar que mantendrá su programa de resistencia en la categoría reina, pero con un cambio: se sumará a la divisional LMDh a partir de 2024.
¿De qué se trata la LMDh?
A partir de este año, las dos categorías de resistencia más importantes del mundo, el WEC de la FIA y la IMSA norteamericana, unificaron reglamentos para que todos los autos puedan competir en ambos campeonatos, haciéndolo más atractivo para cualquier fabricante.
La Le Mans Hypercars (LMH) obliga a los fabricantes a realizar el desarrollo completo del auto, desde el chasis al motor y los sistemas eléctricos obligatorios. Toyota (que tiene entre sus filas al argentino José María López) y Glickenhaus ya están inscriptos en ella y pronto se sumarán Peugeot y Ferrari. La LMDh o Le Mans Daytona Hypercar son desarrollos mixtos, donde se utiliza un chasis homologado con un tren motriz de desarrollo propio. Cadillac, Porsche, Lamborghini, Acura, Audi y BMW serán parte de esta especialidad.
En el caso de Alpine, la marca presentará dos autos en pista, utilizando como base un chasis Oreca y un motor desarrollado en casa, "un propulsor que contará con toda la experiencia acumulada en la Fórmula 1", dice la marca. Este conjunto de motor, chasis y carrocería contará con toda la experiencia técnica de Signatech, al escudería que maneja al equipo oficial, y de Alpine F1 Team.
"El programa de Resistencia de Alpine subraya el apego y la ambición de la marca en materia de automovilismo. Al participar tanto en Fórmula 1 como en el WEC, Alpine será una de las pocas marcas presentes en estas dos disciplinas estrella del automovilismo. Sacaremos lo mejor de la Fórmula 1 y del WEC a través de sinergias técnicas y tecnológicas para tener ventaja sobre nuestros adversarios de prestigio". Laurent Rossi, CEO de Alpine.
Alpine compitió 11 veces en las 24 Horas de Le Mans entre 1963 y 1978, consiguiendo 10 victorias de clase, y la recordada victoria en la general de 1978 con el Alpine A442B pilotado por Jean-Pierre Jaussaud y Didier Pironi.
