Como parte de su plan de movilidad eléctrica, Stellantis se asoció con Samsung para producir celdas y módulos de baterías para autos eléctricos. Los planes de la flamante joint venture involucran la construcción de una planta en América del Norte, que comenzará a operar en 2025 con una capacidad de producción anual inicial de 23 GWh, y con la posibilidad de que en el futuro se incremente hasta los 40 GWh.
Por el momento, la ubicación de las nuevas instalaciones está en estudio, pero es seguro que próximamente se ofrecerán más detalles. “Con la puesta en funcionamiento de las próximas fábricas de baterías, estaremos bien posicionados para competir y, en última instancia, ser líderes en el mercado norteamericano de vehículos electrificados”, declaró Carlos Tavares, CEO de Stellantis.
El plan de Stellantis en Estados Unidos
Stellantis tiene avanzado el proceso para asegurar la capacidad de producción anual de baterías para vehículos eléctricos, allanando el camino para conseguir que para 2030 el 40% de sus ventas en Estados Unidos sean de vehículos electrificados.
Por otro lado, la producción de baterías cubrirá las necesidades de las plantas de montaje de Stellantis en Estados Unidos, Canadá y México, donde se instalarán en las próximas generaciones de los vehículos electrificados del grupo, ya sean híbridos plug-in o 100% eléctricos.
Finalmente, hasta 2025 Stellantis tiene previsto invertir más de 30.000 millones de euros en electrificación y desarrollo del software, mientras que también buscará seguir siendo un 30% más eficiente que la industria en lo que respecta al gasto total en Capex (inversiones de capital) e I+D frente a los ingresos.
