Ford toma una medida drástica contra la escasez de chips

Pasan los meses pero la crisis de chips sigue causando estragos en la industria automotriz a nivel mundial. Como resultado, cada marca trata de sortear la carencia a su manera, y ahora Ford fue la que dio a conocer las medidas que tomará para tratar de ser eficiente con los materiales que posee y, en consecuencia, reducir los tiempos de espera en la entrega de unidades. 

El director financiero de Ford, John Lawler, comentó que la firma apostará por el concepto de la racionalización de los productos: “Podríamos reducir la cantidad de opciones para el consumidor en entre un 80 y 90% en muchos de nuestros vehículos sin sacrificar las ventas. Eso es clave”, dijo. 

Para cumplir con su meta, la marca del "Óvalo" recurrirá a simplificar el número de versiones, enfocándose en las más pedidas o en las que dejen un mayor margen de ganancia. Además, achicará la oferta de elementos opcionales, que estarán disponibles solo en determinadas variantes.  El único apartado que conservará un amplio catálogo será la pintura de la carrocería. 

Por lo pronto, la medida se circunscribe al mercado de Estados Unidos, donde los clientes tenían acceso a un gran número de versiones, equipamientos y motorizaciones de un solo modelo, práctica que suponía ciertas dificultades en las líneas de producción. 

El resultado de las medidas es que se alivianen las líneas de montaje, para hacer más eficiente la producción de vehículos y reducir los tiempos de espera. La Ford F-150 fue la primera afectada por la decisión de la marca.

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