Por el avance de la movilidad eléctrica, especialmente en tecnología y prestaciones, parece que la época de los muscle cars está a punto de extinguirse. Los grandes motores V8 quemando tsunamis de combustible podían resultar atractivos hasta hace algunos años, pero hoy son prácticamente un lujo difícil de pagar y que está cada vez más regulado por los organismos gubernamentales, debido a su contaminación.
En Estados Unidos, cuna de los muscle cars, se sabe que algunos conjuntos motrices no tendrán reemplazo, como por ejemplo el de los Dodge Charger y Challenger V8, cuya extinción ya es solo cuestión de días.
La era de los V8 descomunales está cerca de su fin.
Según un comunicado compartido por Stellantis, Dodge dejará de recibir pedidos de los nuevos Charger y Challenger con motor Hemi V8 a finales de este mes. Esto significa que apenas quedan un par de semanas para anotarse en la lista de compradores y así quedarse con alguno de los vehículos que se fabricarán hasta diciembre.
Tim Kuniskis, CEO de la marca Dodge, declaró: “Mientras hacemos la transición a un emocionante futuro de muscle cars electrificados, estamos marcando el final de una era inolvidable para Dodge", antes de señalar que "para quienes buscan un Dodge Challenger o un Charger, y especialmente una versión con mucha potencia, como los Scat Pack, SRT Hellcat o una edición especial, es realmente la última llamada”.
Dodge Charger Daytona SRT Concept; el futuro del modelo es eléctrico (y que eso no está nada mal).
Actualmente, Dodge está ofreciendo ediciones especiales de estos modelos, denominadas oportunamente como “Last Call” (Última llamada), incluyendo a las variantes SRT Demon, impulsadas por un V8 que alcanza los 1.025 CV. Luego, llegará el fin para los Charger y Challenger V8, pero eso no significará que los modelos dejarán de existir, ya que continuarán en el ámbito eléctrico. Así lo demostró Dodge con el Charger Daytona SRT Concept, que anticipa a un próximo vehículo a batería que cuenta con un diseño retro y cifras de potencia interesantes, que van desde la versión básica de 455 CV, hasta las versiones SRT Banshee, con más de 800 CV y tracción total.
Ahora te toca a vos: ¿Qué opinás sobre el fin de los Charger y Challenger V8? ¿Está bien que la marca mantenga el nombre para el mundo eléctrico? Compartí tu punto de vista en los comentarios, siempre con respeto y sin agredir.
Dodge Challenger SRT Demon