Desde hace unos meses, el automovilismo argentino está revolucionado por lo que sucederá en el Turismo Carretera. Por primera vez en 50 años, la categoría más popular del país renovará su parque automotor a partir del próximo año, con la inclusión de muscle cars norteamericanos y la modernización del Torino.
Mientras la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) lleva a cabo al concurso para elegir el restyling que recibirá el “Toro”, sabemos que los otros modelos que conformarán la grilla serán el Chevrolet Camaro, Dodge Challenger y Ford Mustang, quienes reemplazarán al Chevrolet Chevy, Dodge GTX y Ford Falcon, respectivamente.
El protagonista de esta nota es un Falcon, pero uno que está bien lejos del que conocimos en nuestro país, y que se produjo en Pacheco hasta 1991. Por si no lo sabías, con el correr de los años el modelo del “Óvalo” contó con nuevas generaciones en otros mercados, especialmente en Australia, donde se fabricó hasta el 2016.
Es de Oceanía de donde proviene el que fue denominado como “Falcon GT 2030”, y que trata, ni más ni menos, de una reencarnación del modelo, en la que se vincula parte de su historia con un diseño moderno. Veámoslo en detalle.
Ford Falcon GT 2030: Características principales
Diseñado por el neocelandés Josh Byrnes, el Falcon GT 2030 recupera el nombre de una versión de alto rendimiento del Falcon, realizada por Ford Australia. Presenta un frente con mucha presencia, con un capot bien grande, caída delantera recta y una importante parrilla (en gran parte tapada) negra, unida a un grupo óptico angosto. El paragolpe es bastante limpio, aunque en sus laterales cuenta con bocas de aire para los frenos.
A los costados del modelo, se destacan las líneas de diseño, ubicadas tanto a la altura de las manijas de las puertas como en la zona inferior, por encima de los faldones. Llantas de buen tamaño y un techo sumamente bajo, que cae al sector trasero cual coupé, completan la vista lateral.
La parte trasera del Falcon GT 2030 cuenta con un spoiler en la tapa del baúl; grupo óptico en forma de C, unido por una tira LED; salidas de aire proveniente de las ruedas y un pequeño difusor. Al ser eléctrico, no tiene escapes.
En materia motriz, y siguiendo la tendencia ecológica actual, el diseñador del Falcon mencionó que debería estar impulsado por un tren motriz eléctrico. En concreto, planteó dos opciones: la primera estaría protagonizada por un único motor a batería, ubicado en el eje trasero y que debería producir un mínimo de 222 CV (240 kW). Sobre la segunda, el modelo casi que triplicaría su potencia, gracias a la utilización de dos motores eléctricos, que en conjunto brindarían 617 CV (460 kW) y 850 Nm de torque. La tracción sería integral.
Por ahora, el Ford Falcon GT 2030 es una simple idea de un diseñador neocelandés. ¿Te gustaría que la marca reviva al Falcon con un modelo así? ¿Te lo imaginás en las pistas? Compartí tu punto de vista en los comentarios, siempre con respeto y sin agredir.
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