Desde finales de 2017, los autos que se comercializan en Argentina deben contar de forma obligatoria con luces diurnas. Las también denominadas DRL (por “Daytime Running Lights”, que en español significa “Luces de conducción diurna”) tienen como objetivo mejorar la seguridad vial pero no para iluminar el camino, sino para contribuir a la visualización del vehículo que las lleva.
Ubicadas al frente, generalmente de LED y de encendido automático junto al motor, las luces diurnas cumplen con su función vial. Así lo demostró un estudio realizado en Australia, donde se comprobó que las DRL reducen hasta más de un 20% las probabilidades de un choque frontal. Veamos en detalle.
El estudio fue llevado a cabo por el Centro de Investigación de Accidentes de la Universidad de Monash, situada en Melbourne. Para el análisis se recopilaron incidentes acontecidos entre 2010 y 2017 en cuatro de los seis estados australianos, haciendo foco (lógicamente) en aquellos en los que se vieron implicados vehículos que contaban con las luces DRL.
Tanto de día como de noche, a baja y a alta velocidad, las diurnas disminuyeron el riesgo de accidentes. A plena luz del sol, el porcentaje fue del 7,6%, mientras que, ya sea en el amanecer o el anochecer (cuando la visibilidad disminuye), las chances de evitar un accidente aumentaron hasta el 20,3%.
Otro aspecto que no debe dejarse de lado es el de la velocidad. En zonas con límites superiores a los 75 km/h, y en el amanecer/anochecer, la probabilidad escaló aún más: hasta el 23,8%. En general, la conclusión a la que llegaron los investigadores es que el uso de las DRL puede disminuir el riesgo de accidentarse en un 8,8%
En el documento pertinente, los autores del estudio señalaron que los resultados brindan una “evidencia clara de que se debe considerar la obligatoriedad de las DRL en todos los vehículos nuevos”, algo que no sucede en todo el mundo. Eso sí: aclaran que los autos cuentan con otros sistemas más efectivos para evitar accidentes, como las ADAS (frenado de emergencia, por ejemplo).
Ahora te toca a vos: ¿Qué opinás sobre el estudio? ¿Y sobre el uso de las DRL? Compartí tu punto de vista en los comentarios, siempre con respeto y sin agredir.
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