En 2011, la Mitsubishi L200 dejó de venderse en Japón porque en ese entonces las ventas no eran las que la marca esperaba, y no eran suficientes, a pesar de que era la única pickup del mercado. Si bien era un éxito en el extranjero, la cuarta generación de la L200 solo se vendió en Japón con un motor naftero de 3.5 litros acoplado a una transmisión automática de cuatro velocidades, bastante diferente a los estándares de los nipones, que están acostumbrados a los utilitarios, monovolumenes y "mini camiones".
De todas formas, luego de 13 años de ausencia, la L200 regresa al mercado japonés, y la preventa de esta sexta generación ya fue iniciada e impresionó con su alta demanda.
Según Mitsubishi, en sólo dos meses de oferta, hubo más de 1,300 pedidos por la L200, cifra que superó el objetivo de vender 200 unidades por mes. Hay que destacar que la alta demanda por la L200 es un hito para el mercado japonés, ya que no se suelen ofrecer muchas pick-ups medianas y los clientes son relativamente pocos.
En Japón, la L200 se ofrece en versiones GLS y GSR, ambas impulsadas por un motor turbodiésel "4N16" de 2.4 L y 204 CV, que está acoplado a una transmisión automática de 6 relaciones y tiene una tracción llamada "Super Select 4WD".
En Argentina, aún no recibimos esta generación de la L200, y viendo el poco volumen de ventas que tiene la actual, es difícil que llegue, pero nunca hay que perder las esperanzas.
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Test Mitsubishi L200