Alguien tiene que hacer pronto una película de esto, ya que Netflix está más ocupada en Los Stroll, Daniel Ricciardo y Gunther Steiner. Lo que ha estado pasando en las últimas semanas dentro de Red Bull Racing es digno de una serie de drama y lucha de poderes de HBO y esto puede traer importantes movimientos pronto.
Al parecer todo inició hace un par de años con la muerte de Dietrich Mateschitz, CEO, fundador y máximo dirigente de Red Bull, quien contrató hace más de 20 años a su amigo Helmut Marko, como su asesor de carreras y director del programa de pilotos jóvenes.
Mateschitz también le confió a un muy joven Christian Horner la gestión de su naciente equipo de Fórmula 1, acompañado por Marko, y en muy poco tiempo lograron el objetivo de ser multicampeones y uno de los equipos importantes de la Máxima Categoría.
Desafortunadamente, el 22 de octubre de 2022 Dietrich Mateschitz falleció, generando movimientos importantes dentro de Red Bull.
Antes de ello, Helmut Marko y Christian Horner, ya se habían enfrentado por Checo Pérez, porque fue el inglés quien lo llevó al equipo y lo perfiló como una de las piezas clave en la nueva era del equipo austriaco, fomentando incluso que hubiera una competencia abierta con la joya del equipo, el holandés Max Verstappen.
En más de una ocasión, Marko ha hecho comentarios poco afortunados respecto a Pérez y ha puesto en entredicho el asiento del exicano. Mientras que Horner ha afirmado que el puesto de Checo nunca ha estado en juego, con el equipo obteniendo los mejores resultados de su historia.
Con la muerte de Mateschitz, el poder de Helmut Marko dentro de Red Bull se ha ido desvaneciendo, incluso se llegó a rumorar que sería despedido para este 2024, pero, su as bajo la manga es la lealtad que le tiene Max Verstappen, quien ha afirmado que podría abandonar al equipo si el austriaco es despedido.
Con este jaloneo interno, a inicios de febrero de este año se “filtró” a la prensa que Red Bull estaba investigando una acusación de comportamiento indebido en contra de Christian Horner.
Desde el inicio se señaló al papá de Max Verstappen, Jos, como el posible filtrador de la información, en un intento por debilitar a Horner y buscar tener una mayor injerencia en el equipo.
El 28 de febrero Red Bull exoneró a Horner de las acusaciones, justo un día antes de que el Campeonato 2024 de la Fórmula 1 iniciara en Bahrein. Ahí mismo, minutos antes de la calificación del viernes, se difundió por correo electrónico a periodistas, jefes de equipo, personal de la FIA y otros personajes, unos archivos con las transcripciones de las entrevistas que hicieron los investigadores privados en este caso.
Hasta el momento no se ha revelado esa información, sin embargo, algunas voces desde el paddock han pedido que Red Bull sea más transparente con este caso y revele toda la información, petición que también hizo el CEO de Ford, Jim Farley, socio de motores para 2026 del equipo.
Por otro lado, el presidente de la FIA, Mohammed ben Sulayem, afirmó que la federación prefiere que no se abran los archivos para evitar daños en la imagen de la Fórmula 1.
Para cerrar el GP de Bahrein, Jos Verstappen afirmó en una entrevista que tener a Horner a cargo del equipo tras lo sucedido sólo desestabilizará a la escudería porque “se hace la víctima, pero es el culpable”. Tras ello, el padre del tricampeón mundial fue vetado del equipo.
Ahora, esta semana durante las acciones del Gran Premio de Arabia Saudita, parece que Horner comenzó su contraofensiva, y hace un par de días se anunció que la denunciante, Fiona Hewitson, fue suspendida (con goce de sueldo) por Red Bull.
Hewitson ha sido durante muchos años la asistente personal de Christian Horner, entró a trabajar a Red Bull Racing en 2005 y antes de ello fue piloto; pero, además, se reveló que es la actual novia de Jos Verstappen (y se rumora que antes tuvo algún tipo de romance con Horner).
Para terminar la novela, este viernes se informó que Helmut Marko será suspendido por Red Bull Racing mientras se realiza una investigación porque probablemente fue él quien filtró a la prensa las acusaciones contra Horner.
Minutos más tarde, luego de asegurar la pole position para el Gran Premio de Arabia Saudita, Max Verstappen dijo que Marko debe seguir en el equipo para que él permanezca con Red Bull y cumpla su contrato hasta 2028.
Pero siendo sinceros ¿realmente es tan grande su lealtad a Helmut Marko como para bajarse del mejor auto de Fórmula 1 en la actualidad (y muy probabemente de los próximos años), quedarse sin competir y por ende, perder un nuevo título y patrocinadores?
Esto no va a terminar aquí y en los próximos días seguirán saliendo trapos sucios de los tres implicados, pero, al parecer Horner recuperó ya el control del equipo y podría iniciar una limpia profunda.