En los últimos años y hasta la actualidad, estuvimos viendo un enorme cambio en el mundo de los autos, ya que tanto los clientes como las marcas deciden volcarse a los llamados "SUV" (Sport Utility Vehicle), vehículos con mayor despeje y orientados para "salir un poco del asfalto", pero si pensabas que son algo de esta década, dejame decirte que su historia se remonta a bastante tiempo atrás.
Si bien hay algunos modelos que pueden ser considerados como pioneros de esta clase de vehículos, como la Jeep Wagoneer de 1968, o la Ford Explorer de 1990, ambas tenían algunos "puntos negativos" en particular: los dos eran vehículos de grandes dimensiones que, si bien eran muy deseados por las familias amantes de las actividades al aire libre, eran algo lentos y poco maniobrables en ambientes urbanos, hasta que llegó un nuevo concepto de vehículo "recreativo".
En 1994, Toyota innovó notablemente y presentó la RAV4, un vehículo que llegó para cambiar el panorama automotriz para siempre, con un planteo compacto, con ciertos rasgos urbanos y todoterreno a la vez, además de un diseño muy atractivo y atemporal; y hoy, a 30 años de su lanzamiento, te resumimos un poco de la historia de este ícono de la marca nipona.
Toyota RAV4: Origen y primera generación (1995)
La RAV4 toma su nombre por "Recreational Active Vehicle with 4-wheel drive", es decir, un "Vehículo Recreativo Activo con Tracción a las cuatro ruedas", y si bien debutó en 1994, su origen se remonta a la década de 1980, cuando el equipo de desarrollo de Toyota comenzó a trabajar en un vehículo que combinara el confort de un sedán con las capacidades de un vehículo todoterreno. Con esta idea en mente, la primera propuesta llegó en 1989, cuando se mostró el RAV Four Concept en el Auto Show de Tokio, y luego fue refinado y remodelado para el Motor Show de 1993.
La versión de producción de la RAV4 tiene el honor de ser el primer modelo con apariencia SUV, pero construido sobre una estructura monocasco. La carrocería era de tres puertas y el motor era un cuatro cilindros de 2.0 L que producía 119 CV. Como lo indica el nombre, este modelo ofrecía tracción integral, que funcionaba a través de una caja de cambios manual de cinco velocidades o automática de cuatro. Además, se ofrecía un bloqueo de diferencial central como opcional.
Entre los aspectos destacados de la RAV4, se pueden nombrar su tamaño compacto, el manejo parecido al de un auto, las capacidades todoterreno y su buen nivel de equipamiento, pero hubo dos críticas: el poco espacio en las plazas traseras y la escasez de capacidad de equipaje. En marzo de 1995, Toyota lanzó una versión adicional de cuatro puertas, que aumentaba la longitud en 400 mm y la convertía en un SUV de cinco plazas.
Toyota RAV4: Segunda Generación (2001)
Para principios de la década de los 2000, ya habían aparecido algunos rivales como las Honda CR-V o Subaru Forester, por lo que Toyota se vio obligada a renovar la RAV4, volviendola más grande, refinada y segura, y el motor fue reemplazado por un nuevo 2.0 L que entregaba 148 CV, que luego fue sustituido por un 2.4 litros con 161 CV. Como dato curioso, las estadísticas de la época mostraban que esta RAV4 era adquirida en su mayoría por clientes del sexo femenino.
Toyota RAV4: Tercera Generación (2006)
La tercera generación de la RAV4 apareció a mediados de la década del 2000, y si bien mantenía ciertos rasgos estéticos con la entrega anterior, era más grande, y la versión de cinco puertas podía tener tres filas de asientos, aunque no la vimos en Argentina. Además, se adoptó una suspensión trasera independiente con amortiguadores en diagonal, y en Japón se ofrecío una con carrocería de tres puertas.
La gama de motores fue la más amplia en la historia, con hasta ocho propulsores de nafta o diésel, desde un 2.0 litros de cuatro cilindros hasta un potente V6 de 3.5 litros, pero en Argentina recibimos una con un 2.4 L de 170 CV. La tracción podía ser a las ruedas frontales o AWD, y estaba asociada a una caja automática de cuatro marchas.
Toyota RAV4: Cuarta generación (2013)
La cuarta generación de la RAV4 fue tan bien recibida que las ventas fueron diez veces más altas que cuando se lanzó por primera vez en 1994. En 2016, la gama se amplió para introducir una variante híbrida (que no recibimos en Argentina hasta la siguiente generación), además de introducir el paquete de asistencias al conductor "Toyota Safety Sense", y una variedad de configuraciones de información y entretenimiento.
Uno de los elementos más cuestionados de esta entrega de la RAV4 era la eliminación de la rueda de auxilio en el portón, que ahora pasaba a estar debajo del piso del baúl y provocaba un enorme bulto que reducía la capacidad del mismo.
En 2015, la RAV4 recibe un lavado de cara con elementos más modernos y una estética similar a los Corolla que se vendían en Estados Unidos en esa época, incluyendo luces LED y nuevos paragolpes, así como mejoras en el equipamiento, nuevas llantas y colores.
Toyota RAV4: Quinta Generación (2018)
La quinta generación apareció hace ya siete años, y está construida sobre la plataforma TNGA, que ofrece un centro de gravedad más bajo y una mayor rigidez, lo que se traduce en una mejor sensación de conducción y un mayor confort de marcha. Además, esta arquitectura es mucho más amigable con las tecnologías de electrificación, y en nuestro país sólo se ofrecen variantes híbridas: una convencional y otra enchufable, que fue recientemente lanzada (únicamente por Kinto Share).
Esta generación de la RAV4 combina una carrocería más aerodinámica, con líneas más marcadas y modernas, además de un habitáculo más amplio, al igual que un baúl de gran volumen.
En conclusión, la RAV4 es y seguirá siendo uno de los modelos más icónicos de Toyota, no solo por haber marcado un antes y un después en la industria, sino también porque es uno de los vehículos más vendidos del mundo. Además, a fines del año pasado, se alcanzó el hito de las 14 millones de unidades de RAV4 en todo el planeta, y terminó como el segundo vehículo más vendido de 2023, detrás del Tesla Model Y.
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