En un mundo en el que el futuro apunta hacia la electrificación, cada vez que una marca anuncia que trabaja sobre un nuevo motor de combustión, no podemos aguantar nuestra ansiedad por saber cómo será, y ahora nos llega una noticia de ese estilo por parte de Kia.
Resulta que la firma coreana está desarrollando un nuevo impulsor de cuatro cilindros en línea, 2.5 L turbo, que se instalaría en posición transversal, y si bien la firma no se entró demasiado en detalles, afirmaron que su eficiencia térmica será un 5% mejor que los impulsores actuales, y que su potencia será un 12% mayor. Además, esta nueva motorización sería más compacta, lo que le permitirá formar parte de sistemas de propulsión modulares.
Si tenemos en cuenta el 2.5 L que actualmente utilizan modelos como los K5 y Sorento en Estados Unidos, que en su variante más potente entrega 281 CV, y sumamos el 12% de potencia extra, se superarían fácilmente los 300 caballos de fuerza, mientras que el torque máximo iría más allá de los 420 Nm; y eso sería sin hibridación.
En el caso de los sistemas híbridos e híbridos enchufables, este nuevo motor se podrá asociar a otro eléctrico, reduciendo el consumo de combustible hasta en un 4%, y permitiendo alternar el funcionamiento para adaptarse mejor a cada estilo de manejo. Con respecto a los híbridos en serie o "eléctricos de autonomía extendida" (EREV), el nuevo motor funcionará como generador de energía, por lo que esta tecnología se convertirá en una alternativa a los autos eléctricos a baterías.
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