Presentado en el Salón de Buenos Aires, ya tenemos en Argentina al Camaro SS por partida doble, versión de techo cerrado y convertible. Estamos hablando de la sexta generación del ícono norteamericano que evoluciona en todos los aspectos para sumar cualidades de deportivo a su establecido repertorio de Muscle Car.
Muscle y ágil
Vamos por partes, el costado muscle car del Camaro SS sigue intacto, ya sea en sus líneas poderosas, como en su V8 de 6,2L que entrega unos 461 CV y 617 Nm de torque. El lado de fino viene de la mano de la plataforma Alpha, que es compartida con los Cadillac STS y ATS. Completan una caja automática de 8 cambios y una reducción de peso de 90 kg respecto de la generación anterior, y tenemos un 0 a 100 km/h de 4,2” lo que nos coloca en terreno de superdeportivos.
En pista
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— Autocosmos.com.ar (@autocosmos_ar) 11 de octubre de 2017
Antes de hablar de un montón más de cosas que trae el nuevo Chevrolet Camaro SS, como los generosos frenos Brembo, levas al volante o el Drive Mode Selector con 4 configuraciones de conducción, vamos directo a lo que se siente en pista.
Primero dimos una vuelta de reconocimiento con la capota abierta, nada de apuros, puro disfrutar del rugido del V8 y del viento en la cara reconociendo el trazado Nº7 del Autódormo de Buenos Aires.
Acá comienza la “Operación Sonrisa”
Después, en medio de la recta principal nos detuvimos, cerramos el techo y salimos de parado con el pedal derecho enterrado en la alfombra. Acá comienza la “Operación Sonrisa”: el Camaro sale disparado haciendo menear el tren trasero, antes de darte cuenta pasa los 100 km/h y poco después estás frenando –y fuerte- para zambullirte en el primer curvón. De ahí salimos derecho a Ascari, donde me sorprendí al ver que llegamos a 180 km/h, mucho más rápido de lo que esperaba, y de lo que se sentía al volante.
En ambos curvones el nuevo Chevrolet Camaro es estable y se siente que le sobra agarre. Eso sí, cuando tocó el turno de Canapino, nuestro “chofer” de lujo se dedicó a deleitarme con derrapes que el Camaro le dejó controlar con facilidad. Si en mis manos el Camaro se sintió mucho más refinado que cualquier Muscle Car precedente, en las de un piloto profesional demostró lo efectivo y divertido que puede ser al límite.
Confort y seguridad para volar
Además de refinamiento, velocidad y electrónica aplicadas a la dinámica, el nuevo Camaro SS tiene todas las amenidades de confort con volante multifunción calefaccionado, tapizado en cuero, asientos delanteros con regulación eléctrica, calefaccionados, con ventilación y con memorias para el conductor, climatizador bi-zona y equipo multimedia MyLink con pantalla táctil de 8”, Android Auto y Apple CarPlay, parlantes Bose y cargador inalámbrico de smartphone.
En seguridad la dotación incluye control de velocidad crucero, Head-up Display (HUD), luz diurna LED, faros de xenón, alerta de punto ciego, cámara de visión trasera, monitoreo de presión de neumáticos y alerta de movimiento en marcha atrás). Completan airbags frontales y de rodillas para conductor y acompañante, y laterales extendidos con protección de cabeza.
Precios
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Lanzamiento en Vivo
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