Frente al éxito de ventas del GLA, Mercedes-Benz decidió ampliar la producción de este modelo para satisfacer la demanda de los diversos mercados. Principalmente, el GLA tiene un gran éxito en China, Estados Unidos, Alemania y Gran Bretaña.
Con el aumento de producción, se suma una nueva planta productora, la de Sindelfingen, a 20 km de Stuttgart. Las otras dos sedes donde se fabrica el GLA quedan en Rastatt (Alemania, de donde vienen las que se comercializan en Argentina) y Pekín (China). El centro de Sindelfingen se ocupa principalmente de la producción del Clase S y el Clase E, además de productos de Maybach y AMG. La llegada del GLA a la fábrica marca el punto de partida para el proyecto piloto 'Innovation Factory'.
Por medio de esta táctica, dicha planta además de fabricar vehículos grandes con un lujo superior y el GLA, también será la encargada de producir los vehículos eléctricos de la nueva marca EQ en un futuro.
