Aunque pareciera un mito que Volkswagen construyó vehículos militares para Estados Unidos, esto es cierto. Ocurrió en la Segunda Guerra Mundial, cuando el ejército estadounidense intervino Alemania. A medida que avanzaron en territorio alemán fueron descubriendo una serie de situaciones atroces, entre las que se encontraban las casi 10.000 personas que trabajaban de manera forzada en la planta de Volkswagen en Stadt des KdF-Wagens, ciudad que más tarde se denominó Wolfsburg y que está ubicada al sur de Mittellandkanal.
Fuente: Volkswagen Newsroom.
Una vez que el personal de la fábrica fue liberado -11 de abril de 1945- de las condiciones infrahumanas, los estadounidenses tomaron decisiones innovadoras para el futuro de la gente, la compañía y la ciudad. Semanas más tarde la planta ya estaba nuevamente en funcionamiento, pero ahora, en vez de producir vehículos y armamento para los nazis, se dedicó a construir autos para el ejército de Estados Unidos. De la misma manera que sucedía antes de la intervención, se continuó con el ensamble del Kübelwagenm (Type 82), que sería llamado "Volkswagen Jeep". Posiblemente su nombre se derive de la propia Jeep, marca creada en 1941 para construir los vehículos todoterreno que utilizó el ejército norteamericano en esos años.
La planta
Fuente: Volkswagen Newsroom.
La fábrica reinició operaciones para la construcción del VW Jeep con una fuerza laboral de 200 personas. En total se produjeron 133 Kübelwagen de posguerra, mismas que se ensamblaron en condiciones extremadamente precarias para satisfacer las necesidades de movilidad de las tropas estadounidenses.
Tras la salida de los militares de la región, los británicos asumieron la responsabilidad de la ciudad y lde a planta de Volkswagen. Bajo condiciones que aún eran desafiantes, comenzaron la producción en serie del Type 1, el Escarabajo, justo después de la Navidad de 1945.
La gente
Fuente: Volkswagen Newsroom.
En total, más de 20.000 personas fueron forzadas a trabajar para la antigua Volkswagenwerk GmbH, incluidas unas 5.000 provenientes de campos de concentración. En 1944, dos tercios de los empleados de la fábrica estaban allí contra su voluntad, enfrentando discriminación racial. Se incluían mujeres y hombres judíos, prisioneros de guerra y trabajadores reclutados, así como deportados y desplazados de países europeos bajo la ocupación alemana.
El día de la liberación había más de 9.000 personas trabajando, de las cuales un número superior a 7.700 eran provenientes -de forma forzada- de otros países. El grupo más grande, de 3.000 individuos, provenía de la Unión Soviética, principalmente de Ucrania.
Fuente: Volkswagen Newsroom.
En abril y mayo de 1945 los primeros trenes salieron de la estación de Wolfsburg hacia los países de origen de los trabajadores. A su regreso, algunos de ellos enfrentaron humillaciones y fueron perseguidos debido a que a se los consideraba presuntos desertores o colaboradores de los alemanes.
La ciudad
Fuente: Volkswagen Newsroom.
El ejército de los Estados Unidos dio a la ciudad sus primeras estructuras democráticas con un Magistrat (administración municipal) y un Stadtverordnetenversammlung (ayuntamiento). En su primera reunión, los miembros del consejo decidieron renombrar la ciudad siguiendo la sugerencia hecha por la administración municipal, por lo que tomó su nuevo nombre del castillo de Wolfsburg, cuya primera mención data de 1302.