Hace no mucho tiempo, Dodge dio un adelanto del que será su primer muscle car eléctrico, que le servirá para sustituir a los actuales Charger y Challenger. Estamos hablando de dos modelos icónicos, que ya cuentan con varios años en sus espaldas, y cuya importancia hace que la marca deba realizarles una despedida con bombos y platillos. Y vaya si así será, ya que decidió mejorar la potencia del motor HEMI.
Nuestros colegas de Mopar Insiders sugieren que Stellantis está trabajando en un nuevo Dodge Challenger SRT Hellcat, que tendrá una potencia superior a los 900 CV, gracias a que el V8 HEMI de 6.2L turbo ofrecerá más potencia al funcionar con etanol (E85).
Nosotros conocemos al etanol por su uso en Brasil, pero la realidad es que también es empleado por marcas como Koenigsegg y SSC para obtener grandes cifras de potencia. En el caso del hipotético Challenger, Dodge podría presentar un sistema de combustible dual similar al que se usa en el Demon, que podría funcionar con combustible sin plomo de 91 octanos o de 100 octanos. Si usa este último, desbloquearía todo su potencial de rendimiento.
Para darte una idea del potencial de este Challenger que será el de despedida, hay que mencionar que el SRT Demon producía hasta 840 CV y 1.044 Nm de torque cuando funcionaba con combustible de más de 100 octanos, u 808 CV y 972 Nm con nafta común.
El Dodge Challenger con 900 CV deberá lanzarse en 2023, ya que será el último año de producción del muscle car. Sin duda, sería la despedida perfecta para un auto que supo ganarse a una gran cantidad de seguidores desde su lanzamiento, en 2008.