En las últimas décadas, el camino impulsado a raíz del cuidado del medioambiente impactó con creces en la industria automotriz. La aparición de vehículos eléctricos e híbridos, entre otros tipos de movilidad, es apenas una parte de lo acontecido en un mundo que no se destacaba por ser benévolo con el planeta.
Una de las formas que las automotrices encontraron para poder reducir la contaminación (y de paso ahorrar en inversión, dato no menor) radica en el reciclaje de piezas. Se trata de una iniciativa que ya está desarrollada en varias partes del mundo, y que involucra a distintos elementos de un vehículo.
El trabajo con las piezas recicladas
El proceso de reciclaje de las piezas de vehículos incluye tanto a elementos desgastados por su uso como a aquellos que cuentan con algún daño reparable. Estos son trabajados por proveedores homologados por las automotrices, quienes, según cada caso, desarman, limpian y reacondicionan el elemento, con el fin de que quede listo para su nuevo uso.
Un detalle a tener en cuenta es que el objetivo final de estas piezas no son autos nuevos, sino aquellos vehículos que estén transitando el final de su vida útil. Además, cuentan con garantía, que varía de acuerdo a si se instalan en concesionarios de la marca (un año) o no (tres meses).
La incursión de Stellantis
En las últimas horas, Stellantis anunció el comienzo de la comercialización de repuestos reciclados en Brasil, tanto para vehículos de FIAT como de Citroën, Peugeot y Jeep. Por lo pronto, la línea abarca 100 piezas, e incluye elementos del alternador, la dirección, transmisión automática, el “burro” de arranque y turbo. Más adelante, se sumarán los pertinentes a inyectores y bombas de alta presión.
Junto al anuncio, el conglomerado divulgó una serie de cifras que demuestran el ahorro en materiales y contaminación que permiten este tipo de iniciativas. Por ejemplo, el trabajo en los alternadores permite reducir el uso de materiales en un 84%, mientras que la disminución de la huella de CO2 es del 32%. En la caja automática, los números son del 80% y 76%, respectivamente, mientras que en el turbo llegan al 81% y 40%.
Paulo Solti, vicepresidente del sector de Partes y Servicios de Stellantis para América del Sur, comentó al respecto: “Logramos extender la vida útil de los componentes, reduciendo el impacto ambiental y evitando que sean descartados incorrectamente o incluso reutilizados inapropiadamente en el mercado informal, evitando exponer al cliente al riesgo de futuros daños en su vehículo”. Otro dato a destacar radica en que, además del ahorro en la fabricación de los elementos y su consecuente contaminación, las piezas recicladas se venden en el mercado a un precio hasta 40% menor al de un repuesto convencional.
En el marco de su estrategia eléctrica y ecológica “Dare Forward 2030”, Stellantis afianza su presencia en el mundo de las piezas recicladas, que ya lo tiene como poseedor de 21 centros de reciclado de elementos electrónicos, en los que se trabaja con baterías de vehículos eléctricos. Eso no es todo, ya que comercializa alrededor de 4.5 millones de piezas (todas recuperadas de vehículos que ya no se usan) en 155 países, a través de plataformas online.
Ahora te toca a vos: ¿Qué opinás sobre el reciclaje de piezas por parte de las automotrices? ¿Y de lo hecho por Stellantis? Compartí tu punto de vista en los comentarios, siempre con respeto.
FIAT Cronos 1.3 CVT Primer contacto de manejo