Si hay autos modificables en el mundo, el Mazda MX-5 Miata los supera a todos; ya tenemos muy normalizado verlos con todo tipo de bodykits, swaps, o diversas mejoras, y ahora llega otra propuesta muy interesante.
En los últimos años, con el avance de la electromovilidad, comenzaron a surgir otro tipo de modificaciones: la conversión de autos clásicos a vehículos eléctricos, y Electrogenic es uno de los expertos en la materia, con transformaciones sobre el Citroën DS, el Kia Pride y el Delorean DMC-12, entre otros, pero ahora le toca al Miata.
A través de este kit de electrificación plug-and-play, se sustituye el cuatro cilindros de 1.6L con 116 CV y 136 Nm por un motor eléctrico que eroga 160 CV y 310 Nm, que al igual que la mecánica original, envía la potencia a las ruedas traseras, aunque la caja de cambios pasa a tener una única relación hacia adelante.
La capacidad de la batería es de 42 kWh, por lo que este Mazda MX-5 eléctrico promete una autonomía de 241 kilómetros, y puede cargarse rápidamente con el sistema de carga combinada (CCS) en tan sólo una hora.
La compañía británica logró conservar el equilibrio de peso del modelo original, colocando la mayor parte de su paquete de baterías debajo del capot, junto al propulsor, mientras la parte restante está en el eje trasero. En total, este restomod pesa 1.100 Kg, es decir, 100 kg más que el de combustión, lo que le permite lograr el 0 a 100 km/h en seis segundos, y una velocidad máxima de 185 Km/h.
Cada Miata eléctrico ofrece una serie de modos de manejo seleccionables, como "Eco", que mejora la autonomía, o "Sport", que mejora la respuesta del acelerador.
Steve Drummond, CEO de Electrogenic, asegura: "Parece que no estábamos solos, ya que a lo largo de los años hemos recibido un gran interés en la idea de una conversión del MX-5. Es emocionante revelar finalmente nuestra creación al mundo y brindarles a los fanáticos de este auto la oportunidad de electrificar uno de los autos deportivos más populares de la historia”.
Resumidamente, todo el conjunto es positivo: se aumentó la potencia y el torque, el peso no cambió mucho, y la distribución permanece igual, por lo que lo único que debe haber perdido este Miata es su transmisión y el sonido, pero no las sensaciones que tanto lo caracterizan. Además, nadie se va a dar cuenta que es eléctrico, a menos que lo escuchen o lo vean cargando.