Cuando Renault develó el nuevo R5 eléctrico, muchos sentimos una nostalgia impresionante al ver que hicieron un homenaje casi perfecto al clásico, y si bien hoy ya no es el auto del pueblo o el que gran parte de la población puede comprar, lograron traer la esencia del R5 clásico a la modernidad; pero la cosa no terminó ahí.
Renault no solo trajo de vuelta el R5, sino que, gracias al Alpine A290, también volvieron las variantes deportivas, y si bien la mayoría pensó que ese modelo sería la "variante moderna" del R5 Turbo (incluso nuestra nota la titulamos como "la reencarnación eléctrica del R5 Turbo), la marca del rombo tenía algo más bajo la manga: el R5 Turbo 3E, que vendría a ser la tercera generación del hot hatch, que hasta ahora había sido anticipado como concept, y ahora se presenta la variante de producción.
La saga del Renault 5 Turbo
Prototipo del Renault 5 Turbo original.
Empecemos con un poco de historia: el primer R5 Turbo era un hot hatch "gordo" (así lo apodaron por sus guardabarros traseros prominentes) con motor central, y aunque no era muy potente en su versión de calle, si lo fue en el WRC. Gracias al motor Cléon-Fonte 1.4 Turbo con inyección, era el auto de producción francesa más potente de la época (158 CV), incluso superando al Alpine A310 V6, que tenía 148 CV.
El Renault 5 Turbo se fabricó en cantidades limitadas y usando parte de la plataforma del Alpine A310 en el eje trasero. Las primeras 400 unidades se fabricaron en la planta de Alpine en Dieppe, en rojo con interior azul o viceversa. En cuanto a las modificaciones, tenía piezas de aleación livianas y un tremendo ensanche posterior. Además, las revisiones de diseño fueron realizadas en Bertone bajo la supervisión de Marcello Gandini.
Mas adelante, apareció el R5 Turbo 2, que era una versión más "económica", sin tantas piezas de aleación y con un interior más cercano al del Renault 5 de calle. Se re-homologaron 200 unidades especiales para que la FIA autorizara a pasar desde el Grupo 4 al Grupo B, que es donde fue más famoso, especialmente por la versión "Maxi", que alcanzó los 380 CV; no era cualquier cosa.
La demanda por el Renault 5 Turbo fue mayor de la esperada. En principio, se fabricaron 600 modelos para cumplir con las reglas, y finalmente, se produjeron casi 5.000 unidades.
El Renault 5 Turbo Fase 3
Hoy, el Renault 5 Turbo sigue su rebelde saga, pero con ayuda de la electricidad, y por eso que lleva el apellido "Turbo 3E" y cuando lo miramos, parece un auto del Grupo B del futuro, como una evolución radical de los Turbo 1 y Turbo 2 originales, algo que solo se puede lograr gracias al diseño retro del R5 eléctrico.
Este auto no es un hot-hatch cualquiera, y lo que dice Renault es que este es el "primer mini-supercar del mundo". Les creemos.
La fórmula con el Turbo 3E es casi la misma que tuvieron en los 80: se tomó como base el nuevo Renault 5 E-Tech, pero se tuvo que modificar la plataforma para tener énfasis en el eje trasero, provocando el desplazamiento del parabrisas hacia atrás y aumentando las dimensiones, que pasan de 3.920 mm de largo y 2.540 mm entre ejes a 4.080 mm de largo y 2.570 mm entre ejes, sin contar el exuberante ancho de casi dos metros. Resumidamente, el R5 Turbo 3E es corto como un hatchback del segmento B, pero ancho como una Ferrari.
El resto del auto se podría definir como un "R5 Turbo 1 del futuro", con elementos como:
- focos cuadrados
- ensanches prominentes
- enormes tomas de aire traseras que permiten tanto enfriar los frenos como canalizar el aire
- salidas de aire al lado de las luces posteriores
- línea que envuelve el parabrisas, que sube por el borde del techo y se une con el spoiler, un rasgo icónico del Renault 5 Turbo original.
Por supuesto que hay cosas nuevas, como dos enormes difusores atrás, llantas de 20", luces LED, y otros cambios a la vista.
Si bien atrás hay un ensanche prominente, en este caso es una cuestión de "homenaje" más que por la presencia de un motor naftero grande, ya que como dijimos en reiteradas ocasiones: es eléctrico. Más específicamente, este R5 Turbo 3E cuenta con dos motores eléctricos, uno en cada rueda trasera, y el resto de los componentes electrónicos están sobre el eje trasero, mientras que la batería de 70 kWh está debajo del chasis.
Entre las modificaciones, se eliminaron los asientos traseros, y a pesar de que se colocó una jaula de protección, cuenta con un espacio decente en el baúl. Toda la parte motriz fue desarrollada por Alpine, y alcanza 540 CV y ¡4.800 Nm! de torque máximo. Si, leíste bien.
En materia de cifras y manejo, el 0-100 km/h lo alcanza en 3,5 segundos, y si bien puede aguantar varias vueltas a una velocidad punta de 270 km/h, hay un sistema de regeneración de cuatro niveles y varios modos de manejo. Además, cuenta con un freno de mano para hacer drift.
Otra cifra importante de este Renault 5 Turbo 3E es que no pesa más de 1.450 kilos, algo inusual en un auto eléctrico, logrando que tenga una relación peso/potencia de 2,7 kg/CV.
Obviamente, la alta demanda de potencia hace que la autonomía sea de "solo" 400 kilómetros en ciclo WLTP, pero soporta cargas de hasta 350 kW, gracias a su arquitectura eléctrica de 800V, por lo que puede completar el 80% de la capacidad de las baterías en 15 minutos.
El interior es fantástico, con detalles retro en las costuras y terminaciones, además de dos butacas deportivas en colores asimétricos (amarillo para el conductor, gris para el copiloto), volante deportivo, tiradores de tela en las puertas, pedales metalizados, entre otros.
Lo mejor es el tablero digital, que imita los relojes amarillos del Renault 5 Turbo original, además de la placa metalizada en los pies del copiloto donde se lee "accroche-toi!" que significa "¡agárrate!" en francés.
El resto del equipamiento es similar al Renault 5, con dos pantallas de poco más de 10", el sistema multimedia OpenR Link System, carga bidireccional, ADAS y otras amenidades.
Renault fabricará solo 1.980 unidades, pero lamentablemente no llegarán a América. Las entregas deberían comenzar en 2027 y lo mejor, para los afortunados, es que podrán personalizar el auto a su antojo, como pasa con todos los superdeportivos de hoy.
Primer contacto con el Renault Arkana
