El 15 de marzo de 2017, Mauricio Macri anunciaba la creación del plan 1 Milón, una propuesta coordinada por Francisco Cabrera, ministro de Producción, que buscaba fortalecer a la industria automotriz. Un año después, el éxito o fracaso de este plan se encuentra con declaraciones cruzadas.
De un lado, el Gobierno Nacional resalta puntos positivos desde el anuncio del plan, pero al mismo tiempo, algunos sectores ligados a la Unión Industrial (UIA), bastante maltrada en las últimas semanas por la Presidencia, no ven lo mismo ¿Qué cambió en la industria nacional durante estos doce meses?
Brotes verdes
En un comunicado oficial, Cabrera destacó que el sector "proyecta un quíntuple crecimiento de inversiones, producción, ventas, exportaciones (con un mayor contenido nacional) y empleo". El ministro apunta al repunte del mercado, que cerró en los dos primeros meses del año su mejor bimestre histórico, y a la baja de impuestos que, paradójicamente, podría resultar en un aumento del precio de algunos coches.
Asimismo, se hace eco de los planes de inversión que los fabricantes planean, tal el caso de General Motors o Toyota. Otro punto alto es la diversificación del mercado, aunque hilando fino, esto se debe más a la caída del mercado brasileño.
Del lado autopartista, desde la cartera ven positivo el aumento de la integración local, que hoy está en un 32%, con miras a llegar al 40%. En cuanto a la creación de empleos, el comunicado oficial del gobierno es bastante vago, destacando a Renault-Nissan por su búsqueda de 400 empleados para Santa Isabel y a Volkswagen por la promesa de emplear 2.500 personas a partir de la inversión de USD 650 millones que planea la empresa alemana.
La otra cara de la moneda
Pero no todo es de color de rosa en la industria. La vaguedad de los números de empleo del ministro no es casualidad. Cuando Macri asumió en diciembre de 2015, el sector empleaba un total de 79.778 trabajadores, cifra que en diciembre de 2016 bajó un 4,2% por cierres y despidos. El último dato oficial, de junio de 2017, es desalentador, ya que establece el empleo en 75.769 puestos.
El diario Tiempo Argentino incluso va más allá y revela que la misma Volkswagen no estuvo tomando gente y recién comenzaría a emplear nueva mano de obra para el año 2020.
Otro dato interesante es que, a pesar de ser cierto que la producción creció un 62,2% interanual, con la finalización de 39.085 vehículos, sigue muy lejos de años anteriores. Por caso, en febrero de 2012, la producción fue de 54.159 unidades.
Destino final
El objetivo a mediano plazo del plan 1 Millón es el de llegar a 750.000 vehículos anuales en 2019. Al ritmo que llegan las inversiones y la toma de empleo, ese número se desdibuja bastante. La reciente pelea entre el gobierno de Cambiemos y la UIA no hace más que acrecentar el problema industrial de Argentina.
Con este panorama, parece muy difícil que el gobierno pueda cumplir su meta (una más, y van...), lo que podría poner en peligro la delicada paz, no sólo entre el gobierno y los industriales, sino también con los sindicatos del sector, SMATA y UOM. Lo que menos necesita el gobierno hoy.
