A finales de marzo, la Unión Europea aprobó la continuidad de las ventas de vehículos 0km con motores a combustión más allá del 2035, con la condición de que deberán ser alimentados exclusivamente por combustibles sintéticos.
La decisión fue tomada luego de una ardua negociación con un bloque de países que se oponía a la desaparición de los mencionados impulsores, y que estaba liderado por Alemania e Italia. Justamente, uno de los conglomerados que está realizando trabajos con combustibles sintéticos es el Grupo Volkswagen, lo que parecía haber sido crucial para la postura del gobierno alemán en el debate.
Algunas semanas más tarde, fue el CEO de VW, Thomas Schäfer, quien dio a conocer la postura de la marca sobre el combustible ecológico, con palabras que no deben pasar desapercibidas, teniendo en cuenta que la firma comparte grupo con Porsche y Audi, que ya están trabajando en el tema.
Volkswagen, lejos de los combustibles sintéticos
En declaraciones al medio Automotive News Europe, Schäfer brindó su parecer sobre la decisión tomada por la UE, señalando que generó un “ruido inútil” en la industria. ¿Por qué? Resulta que para el ejecutivo los combustibles sintéticos forman parte de “una tecnología antigua que no brinda ningún beneficio”.
De esta manera, lo dicho por Schäfer va en línea con lo señalado por él mismo meses atrás, al hablar del uso del hidrógeno como combustible para los motores a combustión, cuando manifestó que “es caro, no es competitivo y sus tanques ocupan mucho espacio”.
Además de dejar clara su postura, Schäfer aclaró algunas cuestiones referidas a la actividad del Grupo VW en la medida llevada a cabo por la Unión Europea. En concreto, afirmó que su CEO, Oliver Blume, no estuvo involucrado en la decisión, algo que se pensaba teniendo en cuenta los avances de Audi y Porsche en el mundo de los combustibles sintéticos.
En cuanto a la firma de los anillos, desde hace varios años que viene indagando en el desarrollo del mencionado tipo de alimentación para los motores a combustión, aunque en 2022 afirmó que ello no será suficiente para que estos, tarde o temprano, dejen de usarse.
Por su parte, Porsche está más comprometido en el asunto, tal como lo demostró con la apertura de una planta de producción de combustible sintético en el sur de Chile a finales del año pasado. Para la firma de Stuttgart, y en palabras de Michael Steiner, del área de Investigación y Desarrollo de la marca, “el potencial de los combustibles sintéticos es enorme”, teniendo en cuenta que podrían ser utilizados en buena parte de los millones de autos a combustión que actualmente se utilizan en todo el planeta.
En contrapartida, Volkswagen no solo ya anunció que en el 2032 finalizará la venta de sus modelos a combustión en Europa, sino que también dio a conocer cuáles serán sus últimos modelos en ofrecerse con dicha motorización.