Autos Clásicos de Argentina: Citroën Ami 8

Citroën tiene una larga trayectoria en Argentina, con modelos muy recordados como los 2CV/3CV, Mehari, Berlingo, y el protagonista de hoy, el Ami 8. A continuación, te contamos su historia.

El Citroën Ami en el mundo

Si bien en la actualidad el nombre Ami se utiliza para un auto eléctrico pequeño, en realidad “revive” una denominación clásica que nació en 1961 con el Ami 6, un sedán que se posicionaba por debajo del DS y por encima del 2CV (a pesar de que compartía su plataforma) y que se destacaba por elementos como sus soluciones de diseño, entre ellas, el pilar C con remate invertido.

El Ami 6 tuvo un inicio complicado en Europa, ya que las cifras de ventas no fueron las que la marca esperaba, y por ese entonces se creía que el responsable era su diseño muy rupturista y arriesgado.

Unos años más tarde, la marca del doble chevrón estaba intentando salvar la situación como fuera posible, y también hubo intentos por fuera de la empresa, cuándo el diseñador y carrocero Heuliez imaginó una variante rural, que no convenció a los ejecutivos de Citroën.

Finalmente, en 1964, la marca terminó “aceptando” la propuesta de una variante con portón trasero y le pidió a Robert Opron (responsable de modelos históricos como el Citroën DS y la Renault Fuego, entre otros) que la diseñara. El “Ami 6 Break” fue un éxito: dos de cada tres unidades eran familiares, y en 1966 se convirtió en el auto más vendido de Francia.

El Citroën Ami 8, la evolución del Ami 6 que se produjo en Argentina

En 1969, se presentó en Europa un restyling o la “evolución” del Ami 6, y pasó a ser llamado “Ami 8” (en otros mercados “Citroën 8”), y si bien seguía estando basado sobre la plataforma del 2CV, tenía diferencias estéticas muy marcadas con respecto a su antecesor, en principio porque pasaba de ser un sedán convencional a uno con remate fastback (aunque no tenía portón, sino baúl), mientras que en la parte delantera, se cambiaba el capot en forma de “V” entre las luces por uno más plano. Un poco más tarde, llegó la variante Break (rural), con los mismos cambios en la parte delantera y algunos leves retoques en la trasera, como el reposicionamiento de las luces, y más.

En Argentina, el Ami 8 se comenzó a producir en la planta de Barracas en 1970, únicamente en versión familiar “Break”, siendo el modelo más grande y oneroso que la marca fabricaba en nuestro país, lo que rápidamente sorprendió a los argentinos, que venían acostumbrados a modelos "austeros" como los 2CV y 3CV.

A lo largo de su trayectoria en Argentina, hubo dos versiones del Ami 8: “Club” y “Elysee”, esta última la “tope de gama”, que se diferenciaba por algunos elementos estéticos como las llantas, molduras específicas, y otros.

La plataforma era la misma que la de los 2CV y 3CV, aunque la carrocería del Ami 8 era 150 kg más pesada. El modelo nacional se diferenciaba por tener frenos a tambor en las cuatro ruedas, mientras que el europeo tenía discos delanteros. Además, las manijas de las puertas del modelo argentino eran las del Ami 6.

Con respecto a la motorización, el proyecto del Citroën Ami planteaba tres opciones:

• Juntar dos motores de 2CV y hacer un cuatro cilindros bóxer de 950 cc
• Usar un dos cilindros de 610 cc de Panhard (socia de Citroën)
• Tomar el motor del 2CV y agrandarlo.

Finalmente, la marca eligió la tercera opción para el Ami, tomando el motor de 425 cc del 2CV, y llevándolo a 602 cc. Curiosamente, esta es la misma mecánica que luego impulsaría al 3CV presentado en 1969 en nuestro país, y en el caso del Ami 8 nacional, se decidió adoptar un nuevo carburador de doble cuerpo Solex, que permitía que la potencia creciera hasta los 35 CV.

El fin del Citroën Ami 8 en Argentina y el mundo

Finalmente, el Ami 8 también fue víctima del cierre de las operaciones de Citroën Argentina a fines de 1979, pero a diferencia de los 3CV y Mehari, no tuvo otra vida de la mano de IES, por lo que su trayectoria en nuestro país terminó luego de casi diez años, con una producción total de casi 49.000 unidades.

A nivel mundial, se produjeron más de 2.500.000 Citroën Ami (más de 1.800.000 Ami 6 y más de 700.000 Ami 8) y si bien en Argentina duró hasta fines del ´79, en Europa fue reemplazado un poco antes por el Visa, un hatchback chico que también se comercializó en nuestro país un tiempo después.

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