Era febrero de 1989 y debutaba en el Salón de Chicago uno de los mejores autos deportivos japoneses de la historia. Sí, nos referimos al Honda NSX, bajo la tutela de Acura, la marca de lujo de Honda en Estados Unidos. Desde ese día, el NSX rápidamente se convirtió en un referente de los autos deportivos de la década de 1980, gracias a sus cualidades y ser más accesible que sus competidores europeos.
Si bien la fecha oficial del nacimiento de este japonés es de 1989 y el inicio de comercialización fue en 1991, el proyecto de Honda inició cinco años antes. Tomando todo el know-how obtenido en la Fórmula 1, los ingenieros de la marca nipona iniciaron la creación de un auto 100% deportivo, con la característica principal de tener al motor ubicado en la mitad trasera del vehículo.
Al bloque V6 transversal también hay que sumar otra serie de tecnologías como el chasis de aluminio que permitía una gran ligereza y un interior sumamente cómodo.
El nombre derivó de las iniciales provenientes de New (nuevo), Sportscar (deportivo) y la letra X de eXperimental. Este nombre estaba pensado solamente para el prototipo, pero el éxito hizo que se tomara la decisión denominarlo de esta manera.
Al día de hoy, el NSX tiene dos generaciones. La primera fue de 1991 a 2005 y la segunda que hizo su aparición en 2016, luego de que Honda decidiera traer de vuelta este emblema de la compañía.
A 30 años del origen del Acura NSX