Después de la incursión en el mundo de las SUVs por parte de marcas de fuste como Porsche, Jaguar o Bentley, parece que la hora le ha llegado a Aston Martin para tener su propio utilitario.
La empresa ya ha comenzado con la edificación de las instalaciones en Gales, que reciclarán una terna de hangares para la construcción del vehículo, bautizado por ahora como DBX. La marca bond explicó que se trata de una inversión de USD 280 millones para acondicionar el espacio en cuestión.
Una vez que esta fábrica entre en funcionamiento, Aston Martin creará cerca de mil puestos de trabajo y tendrá una capacidad de producción anual de 7.000 vehículos. No solamente se ensamblará la DBX, sino que en esta planta galesa también se trabajará en dos modelos de los que no se tiene más información que el año de comienzo de trabajo (2020 y 2021).
¿Se copará Ferrari con la moda de las SUVs?