El Turismo Carretera es la categoría más importante del automovilismo argentino. Es claro que no tiene los autos más modernos, pero su historia y el arraigo popular que se construyó desde los inicios de su existencia (principalmente en el mal llamado interior del país) la hacen por lejos la más destacada.
Con más de 80 años de vida, la especialidad del deporte motor más longeva del mundo (récord certificado por el Guiness World Records) cuenta con múltiples particularidades, y una de ellas es su parque automotor, que desde hace varias décadas está restringido a cuatro marcas y modelos: Ford Falcon, Chevrolet Chevy, Torino 380W y Dodge GTX.
En los últimos 30 calendarios, algunas marcas vivieron mayores momentos de gloria que otras, pero todas supieron disfrutar las mieles de la victoria. Por eso se nos ocurrió realizar una recopilación con las mejores cinco victorias de cada una durante ese periodo, aunque sin armar un ranking específico. Esa elección te la dejamos a vos, que la podés dejar en los comentarios debajo de la nota.
En la entrega de hoy nos centraremos en Chevrolet, que con 17 títulos fue la marca que más celebró en el lapso que aquí nos compete.
Olavarria 1990 - Satriano y la vuelta a la gloria del Chivo
Fuente: Historia TC.
La década del 80 no había resultado muy fructífera para Chevrolet: si bien sus representantes lograron victorias y pelearon campeonatos, la marca apenas logró un título, y encima en un certamen que en su mayoría se disputó en 1979. Aquella consagración de Francisco Espinoza en el torneo 1979/1980 significó el inicio de una sequía que recién se cortaría una década más tarde, de la mano de Emilio Satriano.
En 1990, cambios reglamentarios mediante, Chevrolet retomó el protagonismo y el “Obispo” de Chivilcoy logró coronarse gracias a un andar sólido que efectivizó en cuatro éxitos consecutivos. El último de ellos fue en el circuito semipermanente de Olavarría, donde se disputó la 15ª de las 17 citas del año.
La ciudad cementera recibió al TC en su clásico trazado de poco más de 17 kilómetros, que el domingo 18 de noviembre se completó en tres ocasiones para la serie y en nueve para la Final. En épocas en las que los resultados se determinaban por tiempo y no por las posiciones en pista, Satriano finalizó 2º en su parcial, por detrás de Osvaldo Morresi (Chevrolet).
En una Final disputada bajo un intenso calor, la tarea del bonaerense fue de menor a mayor, ya que desde la 5ª ubicación escaló progresivamente en el clasificador producto de la deserción de sus rivales para a tres vueltas del final llegar a la punta, gracias a la rotura de un neumático del Falcon de Juan Bautista de Benedictis.
Aquel triunfo, que significó el cuarto y último de Satriano en la temporada, resultó especial para los hinchas de Chevrolet debido a que no disfrutaban tantos éxitos consecutivos desde los seis al hilo de Roberto Mouras en 1976, siendo además una racha que hasta hoy ningún piloto del Moño pudo repetir. En cuanto al "Obispo", el logro le permitió estirar la ventaja en el torneo sobre Oscar Castellano (Ford) de cara a las últimas dos competencias, en las que definió el título a su favor y con ello le dio a Chevrolet una corona que se le había negado por más de diez años.
Nueve de Julio 1997 – La primera del séptuple
Ortelli supera a Urretavizcaya y toma la vanguardia de la serie. Fuente: Historia TC.
Uno de los máximos ídolos de Chevrolet es Guillermo Ortelli. El de Salto, que con 47 años aún permanece en actividad, es el que más alto llevó al Moño en toda la historia del TC, al ser el piloto que más títulos (7) y victorias (29) obtuvo con la marca. La historia entre Chevrolet y el “Guille” comenzó en 1997, tras haber debutado en la categoría en 1994 con Ford y disputado con la misma marca pero en 1996 su primer año completo, que concluyó en un auspicioso 3er lugar.
Tras varios sinsabores, en la séptima fecha Ortelli sumó su primer triunfo con el “Chivo”: fue en el autódromo de Nueve de Julio, el domingo 8 de junio. Aquella jornada la empezó partiendo desde el primer lugar de la serie inicial luego de lograr la “pole” el día anterior, posición que en los primeros metros perdió en manos de Roberto Urretavizcaya (Ford), a quien en el epílogo pudo superar para llevarse el parcial.
Si bien la Final (a 21 giros) la largó 3º, por detrás de los Chevrolet de Juan María Traverso y Luis Minervino, al cabo del primer recorrido ya había tomado el liderazgo gracias al despiste del de Ramallo -que se tocó con “Patita”- y al sobrepaso que realizó sobre el de Chacabuco en plena recta principal.
Desde allí supo mantener la vanguardia a pesar de la presión de Fabián Acuña (Chevrolet; a la postre 2º) y a una pérdida de aceite, que le hizo emanar un humo blanco que cautivó al ambiente pero que finalmente no perjudicó el andar de la máquina. Terminó siendo la primera alegría que ledio la primera alegría a los fanáticos del “Chivo”. El resto ya es historia.
Río Cuarto 2007 – Rebaño de chivos
Altuna adelante, seguido por Ledesma, Spataro y Ortelli. Fuente: Historia TC/CORSA.
La paridad con la que cuenta el TC hoy en día hace parecer imposible lo acontecido el 19 de agosto de 2007, día en el que Chevrolet dominó de tal manera que copó los cinco primeros lugares de la Final. Este hecho, único en los últimos 30 años de la categoría, sucedió en Río Cuarto, escenario de la 11ª fecha de la temporada. El circuito cordobés albergó un paseo de los “Chivos”, que además de la competencia decisiva se adueñaron de las dos tandas de clasificación y las tres series.
El vencedor fue Mariano Altuna, quien ese fin de semana obtuvo el mejor registro en ambas “clasificas” y la victoria en el primer parcial. En la Final largó adelante de todos y completó los 23 giros allí, siempre teniendo como escolta a Christian Ledesma -ganó la 2ª serie-, su compañero de equipo y que corrió pensando en el campeonato que a fin de año iba a obtener. Emiliano Spataro -vencedor de la 3ª batería- largó y terminó 3º, por delante de Ortelli y Matías Rossi, quienes por momentos libraron un entretenido duelo.
La faena de Chevrolet podría haber sido mayor de no ser porque Omar Tanoni, que marchaba 6º, se despistó a dos giros para la bandera a cuadros. Por otro lado, el único que pudo hacerle frente a las Chevy en algún momento de la prueba fue Omar Martínez (Ford), que se ubicaba 5º cuando una falla en el motor lo hizo desertar mientras recorría el 3er giro.
Buenos Aires 2010 – Triunfo y título de la mano de Canapino
Canapino presionado por el "Gurí" Martínez, quien buscó ayudar a Werner (al fondo) en la lucha por el título. Fuente: Agencia DyN.
“Hay victorias que valen campeonatos” es una frase que suele utilizarse en el automovilismo, pero la realidad es que no son tantos los casos en los que efectivamente una cosa lleva a la otra. Sin embargo, el caso que vamos a mencionar sí forma parte de estas contadas ocasiones. Tuvo lugar el 28 de noviembre de 2010 en el autódromo de Buenos Aires, donde se definió el certamen de TC de aquel año.
Ya con la Copa de Oro implementada desde 2007, Agustín Canapino (Chevrolet) llegaba a la definición como escolta de Mariano Werner (Ford), que lo superaba en lo más alto del play-off por 15,25 unidades. En lo que era su segundo torneo completo en la categoría y con apenas 20 años, el “Titán” había logrado llegar a la última fecha con buenas chances matemáticas pero sin ganar, requisito indispensable para coronarse. Para darle más condimento al asunto, Werner tampoco había triunfado, por lo que Canapino no necesitaba superarlo en puntos sino solo vencer. “Solo”, como si fuera tan fácil.
Tras una buena clasificación (2º) y mejor serie (1º), el arrecifeño largó la Final desde el primer lugar. Rápidamente se alejó de Norberto Fontana (Torino), pero desde el tercer giro empezó a recibir el acoso de Werner, que luego de partir 4º ya era su escolta. La pelea pasó a ser un mano a mano entre Chevrolet y Ford, Ford y Chevrolet. El que ganaba era campeón.
Más allá de un susto con una mancha de aceite en el curvón Salotto (que lo hizo corregir para no perder el auto) durante la cuarta vuelta, y alguna que otra aproximación del Falcon giros después, Canapino no vivió grandes momentos de zozobra con Werner detrás. Por ello, no extrañó que faltando diez de los 25 giros pactados Omar Martínez (Ford), compañero de equipo del paranaense y que se ubicaba 3º, superase a este para ir a molestar al líder e incitarlo a algún posible error, para luego dejarle el primer lugar a su coequiper.
El “Guri” presionó pero no pudo lograr su cometido, por lo que Canapino obtuvo su primer éxito en el TC, logro con el que además abrió su vitrina que hoy ya ostenta cuatro coronas. Poco le importó al campeón más joven de la historia de la categoría que en la Copa de Oro haya terminado 2º, a 9,25 unidades de Werner, en una definición que para la marca significó el retorno a la gloria luego de dos años, pero principalmente una gran victoria por sobre Ford, la eterna rival.
San Nicolás 2019 – Victoria ¿400? de Chevrolet
Canapino al frente sobre Ardusso y Silva. Fuente: ACTC.
El éxito más reciente que contemplamos en esta lista es el último de Chevrolet. ¿Por qué? Porque según la ACTC (en algunas plataformas sí, en otras no) y diversos medios de comunicación, el triunfo logrado por Canapino en San Nicolás el pasado 13 de octubre fue el 400º del Moño en la categoría.
Sobre la competencia en sí (a 30 vueltas), hay que mencionar que el arrecifeño partió 3º tras haber clasificado 2º y ganado su serie. Allí se mantuvo hasta el quinto giro, cuando aprovechó un leve despiste de Gastón Mazzacane (Chevrolet) para posicionarse como escolta de Facundo Ardusso (Torino), a quien superó una vuelta después.
Durante el resto de la competencia el campeón vigente no perdió el liderazgo, en lo que terminó siendo su segundo triunfo del año y el que lo puso a tiro de la punta de la Copa de Oro que terminaría obteniendo dos fechas más tarde, en la última cita de la temporada. Así, Canapino sumó su tercera corona consecutiva con Chevrolet, algo que en la historia solo lo habían podido obtener Traverso (1995, 1996 y 1997) y Ortelli (2000, 2001 y 2002).
Ahora hablemos del número redondo. Luego de la carrera, la ACTC comunicó en sus redes sociales que Canapino le dio a Chevrolet su 400º triunfo. Sin embargo, en la propia web de la categoría, donde cuenta con un apartado en el que menciona a cada uno de los ganadores de las más de 1.000 competencias disputadas, Chevrolet cuenta con 394 éxitos. A esta incongruencia se le suma que desde Historia TC, foro especializado en la categoría, señalaron que la marca suma 399 éxitos. Así nos lo hizo saber el usuario clasicman, de nombre Marcelo y especialista en estadísticas teceístas.
Posiblemente, algunos errores y diferencias entre las pruebas catalogadas como oficiales y no oficiales, de “no ganadores” o “debutantes”, todas disputadas entre las décadas de los 50 y los 80 (cuando la información no abundaba como sucede hoy), compliquen la ecuación. Ya habrá tiempo para revisarlo a fondo.
¿Cuál de estas cinco victorias considerás como la más importante? ¿Creés que faltó alguna? ¡Agregala en los comentarios!
Fuentes consultadas: Historia TC, revista Campeones, Carburando y ACTC Media TV.